Guillermo de Ockham

Guillermo de Ockham

(O de Ockham) Pensador inglés, fundador de la escuela nominalista (Ockham, Surrey, h. 1285 - Múnich, Baviera, 1349). Este fraile franciscano estudió en la Universidad de Oxford, en la que empezó a enseñar como bachiller desde 1317; el carácter innovador de sus enseñanzas hizo que nunca se le diera el grado de doctor (razón por la que se le conoce como el venerable principiante) y que entrara en conflicto con la Iglesia.

El papa Juan XXII le hizo comparecer en su corte de Aviñón en 1324 y condenó como heréticas muchas de sus doctrinas, incluida su defensa de la pobreza como exponente del espiritualismo franciscano; fray Guillermo reaccionó huyendo en compañía del general de la orden y poniéndose bajo la protección del emperador Luis de Baviera en Pisa y luego en Múnich, lo que le costó la excomunión (1328). Hasta poco antes de su muerte mantuvo la polémica con los papas sucesivos (Benedicto XII y Clemente VI).

La filosofía nominalista parte de la crítica al racionalismo y a los conceptos universales: todo conocimiento está basado en la lógica, operando sobre la percepción sensorial de objetos individuales concretos; y no deben multiplicarse inútilmente los entes creando conceptos abstractos que no procedan de la experiencia (esta economía de objetos es la que luego se conoció como la navaja de Occam).

Su teoría inductiva del conocimiento, cercana al empirismo, le llevó a una visión contingente del mundo, en la que abrió amplios espacios para la libertad. De ella resultaba el carácter meramente probable de las afirmaciones científicas y la imposibilidad de una demostración rigurosa de la ley moral e incluso de la existencia de Dios. De manera que su concepción teológica se fundamentaba en la fe en un Dios omnipotente inasequible por la razón (dando comienzo con ella la separación entre Teología y Filosofía).

Más inaceptables aún para el Papado fueron sus propuestas de separación entre la Iglesia y los poderes temporales (ideas que ya habían provocado años antes la excomunión del emperador); con ellas se inició la evolución hacia un Estado laico separado de la Iglesia. Guillermo refutó la supuesta infalibilidad de los papas y defendió que el poder de éstos debía estar limitado por el derecho natural y por la libertad de los cristianos.

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Pensamiento

El pensamiento de Guillermo de Ockham supone un giro del pensamiento escolástico: es casi una disolución del mismo. El S.XIV, con este pensador a la cabeza, rompe la confianza en las grandes síntesis entre la filosofía y el cristianismo (síntesis agustiniana de San Buenaventura y la síntesis aristotélica del tomismo), y da lugar a una radical separación entre la razón y la fe, entre la filosofía, que gana independencia, y la teología. Para Ockham no se puede demostrar racionalmente ni la existencia de Dios ni las atributos divinos. Estos problemas quedan para el ámbito de la revelación eliminando así los preámbulos de fe de Sto. Tomas.

La confianza de Guillermo de Ockham en la experiencia directa (conocimiento intuitivo)  y la negación de la existencia de los universales suponen un precedente de lo que más tarde va a ser el empirismo moderno británico.

• Conocimiento

El tema central de la filosofía de Ockham  es el de la existencia y naturaleza de las ideas universales, entendiendo por tales aquellas ideas que se pueden aplicar a varios individuos realmente distintos entre sí, por ejemplo a Pedro, Juan , Antonio se les aplica el concepto hombre, siendo cada uno una realidad individual, Pedro es Pedro, y Juan es Juan y Antonio es Antonio .

La cuestión de la existencia y naturaleza de los universales se la plantea con ocasión de la distinción entre Dios y las criaturas: ” An Deo et creaturae sit aliquod conmune  univoce praedicabile essentialiter de utroque” ” Hay en Dios y en las creaturas algo común que se pueda decir  de ambos de una forma unívoca y en el mismo sentido ?( I Sent., 2,4A.)

Para contestar tal pregunta ve necesario explicar  el concepto de univocidad y de universal.

Con relación a la naturaleza  de las ideas universales OcKham distingue dos maneras de considerar el universal de una forma   lógica y ontológica.   Pregunta ¿ Existen los universales en sí mismos fuera del alma como entidades reales y ontológicas  ? La respuesta de Ockham  es categórica : Las ideas no tienen ningún tipo de existencia real fuera de la mente, fuera de la mente lo único que existe son los individuos concretos y particulares y estos no tienen en sí mismos nada en común.

Sigue preguntando: ¿ Tienen las ideas universales existencia dentro del alma  que permita su aplicación a muchos individuos que sean semejantes? Contesta : El término universal se encuentra dentro del alma de tres maneras :  en la mente  como idea, concepto; en la palabra y en la escritura. En estas tres maneras el universal es un signo  de una cosa distinta de lo que ella es, y se pone en lugar de las cosas. Pero la palabra y las escritura  son signos convencionales de las cosas a las que representan por acuerdo y voluntad de los hombres.

• Dios

Aplicando esta teoría sobre la naturaleza del universal al conocimiento de Dios obtendríamos el siguiente resultado. De Dios no podemos tener ninguna noticia intuitiva  directa ni  por medio de los sentidos, ni por medio del entendimiento , Dios aunque es un ser exterior a nosotros no lo podemos ni ver, ni oir  etc  por lo mismo queda descartada esta forma de conocimiento de Dios por impresión. ( Abstraccion)

Pero de Dios tampoco podemos tener un conocimiento directo e intuitivo con el entendimiento   pues el conocimiento intuitivo de naturaleza intelectiva  presupone el conocimiento intuitivo a través de los sentidos, en consecuencia es imposible conocer a Dios por medios naturales. Ni tener un concepto abstractivo de Dios.

Ockham toma conciencia de esta conclusión y recurre a un rodeo que es más bien un subterfugio: ” Tamen Deus potest causare notitiam  abstractivam  deitatis et aliarum rerum , sine notitia intuitiva praevia. Et illa notitia  deitatis  abstractiva es communicabilis homo viatoris” ” Sin embargo Diios puede causar un conocimiento abstrativo de la divinidad , sin una noticia intuitiva previa.” ( Quodl.,I,11 ).

De esta forma tendríamos una idea de Dios pero sin que pudiéramos saber si a esa  idea le correspondía la existencia , es decir podríamos tener una idea de Dios prescindiendo de su existencia.

Esta doctrina tiene también su repercursión en las pruebas sobre la existencia de Dios : ” No potest sciri evidenter quod Deus sit” ” No podemos saber de na forma evidente si Dios existe” I Sent. II, 5)

Tampoco podemos saber nada acerca de los atributos divinos pues en Dios sus atributos se identifican con su ser, esos atributos no son más que distintos nombres que damos a la misma realidad.

En consecuencia  sólo podemos saber que hay un solo Dios por la fe: ” Ex hoc non sequitur quod possit demonstrare quod tantum unus est tale, sed hoc fide tenemus.” De esto no se sigue que podamos demostrar que existe un solo Dios, pero esto los sabemos por la fe.( ibidem)

De esta forma Ockham remata todo tipo de teología natural remitiendo todas las cosas referentes a Dios a la fe, generando multiples sospechas sobre el poder de la razón.

·         Mundo

Pone fin a la escolástica y supone un cambio en la concepción del universo por medio de la crítica a la física y metafísica de Aristóteles y una ruptura con los ideales griegos. Lo realizó suponiendo la omnipotencia de Dios.

Ockham parte de la afirmación del credo “Creo en Dios padre todopoderoso”.En ella se basa todo su planteamiento filosófico y su crítica de la teología y a la filosofía anterior.

Ockham considera que la teología anterior a considerado demostrables por la razón verdades exclusivas de la fe (existencia de Dios, inmortalidad del alma)

·         Hombre

En sus escritos, Ockham apoyó al emperador, defendiendo la separación de los dos poderes. Su tesis fundamental es que el Papa no tiene jurisdicción alguna en el ámbito de los asuntos temporales. Defiende que la elección de los gobernantes corresponde al pueblo, de acuerdo con los procedimientos establecidos y aceptados.

Pero Ockham no se planteó la independencia del Estado frente a la Iglesia, sino la independencia del imperio respecto al papado. No obstante, su tesis de la falta de jurisdicción temporal del Papa resultó aplicable a las relaciones entre los nuevos Estados y la Iglesia.